sábado, 27 de febrero de 2010

Terremotos y tsunamis

Tiembla. Como un niño a la intemperie, sin calzado, sin abrigo, sin cariño. Aúlla estruendosamente. Como si el dolor fuera tan irresistible como el del desgarramiento de la identidad, de los sueños, de la libertad. Se sacude, furioso. Como queriendo desprenderse de un manto de aves de rapiña, de moscardones sedientos, de cucarachas feroces. Y arrasa con lo que está a su alcance, indefenso, pero brutal. Como una fiera defendiendo su alimento, su cría. El mundo tiembla, de repente. Está furioso. Y aúlla. Y se sacude. Y arrasa con todo. Y se rebela. Y se defiende, quizás, de tantas injusticias.


Nota: Son al menos 708 los muertos en Chile por el terremoto que sacudió al país esta madrugada. Un niño de 8 años murió en Salta, por otro sismo, apenas unas cuantas horas después. Haití todavía no logra recuperarse de la catástrofe sísmica de hace dos meses, que mató a cerca de 200.000 personas. En varios países del sureste asiático todavía sueñan con el tsunami que arrasó con cerca de 300.000 vidas. SOS al mundo, por favor.

2 comentarios:

Malena dijo...

El mundo -los habitantes que al menos pensamos un poco- debiéramos comenzar por pequeñas cosas a cuidar nuestro planeta: no usar bolsas de plástico, consumir poco o nada de combustible... tal vez sea una curita para este mundo que aulla de dolor por la desaprensión de los humanos. Besos, Lore.

Paula dijo...

Si, yo coincido con Malena, creo que hay que empezar por lo que podemos hacer dia a dia y sumar a otros para que lo hagan.besos.